El déficit se situó, en 2011, en aproximadamente un millón de euros, según ha informado Thierry Castillo, encargado de los asuntos económicos del Templo. Y las previsiones para este año 2012 no son mucho más esperanzadoras, dado que no se prevé el equilibrio económico hasta 2015.
El factor de representar un punto clave en la peregrinación mariana, no ha imposibilitado que los gastos sean menores que los ingresos. Muy por el contrario, a pesar de haber aumentado el número de visitantes, han disminuido las donaciones entre un 3 y un 5 por ciento. Desde el Santuario de Lourdes han pedido ayuda y colaboración a los “amigos de Lourdes” para que este punto de peregrinación cristiana pueda permanecer abierto.
Según apunta el mismo Thierry Castillo, el problema en el descenso de las aportaciones económicas por parte de los peregrinos se debe a que estos cada vez visitan menos el templo por su cuenta. Por el contrario, lo hacen en viajes de grupo y no siempre se hospedan en los lugares del sitio sagrado.
La mayor parte de los ingresos que recibe el Santuario procede de las ofrendas de los creyentes y visitantes, que constituyen un 76% del presupuesto. Por su parte, el pago del personal, un total de 450 empleados, para mantener la gruta y sus alrededores, se atribuye un 52% de ese presupuesto.
Fiel reflejo de la crisis económica es que la solución al déficit pasa por reducir costes y establecer ajustes. Los empleados son, una vez más, el objetivo principal de los recortes, así como realizar únicamente las tareas que sean urgentes y necesarias. Para este año no se renovarán algunos de los contratos temporales ni se contratarán nuevos empleados para suplir la plaza de los que se jubilen. Por último, también se reducirá un 20% el número de trabajadores presentes únicamente en la época de máxima afluencia de peregrinos. Todo ello como medida para lograr el objetivo de equilibrio económico previsto para 2015.
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